El proyecto GreenGELAIR trata de resolver un problema que actualmente presentan las pinturas utilizadas en diversas industrias. Estas pinturas contienen cromo hexavalente y, según las regulaciones medioambientales (REACH), deben sustituirse por otras en la mayoría de los sectores, particularmente en el aeronáutico. En este sentido, la tecnología sol-gel se define como una de las alternativas limpias a los recubrimientos compuestos por cromo, según los investigadores. “El sistema sol-gel propuesto será versátil y competitivo –adelantan–, minimizando las operaciones de mantenimiento, costes y eliminando los problemas medioambientales de los sistemas actuales”. Los resultados del proyecto, apuntan, podrán ser aplicados en otros sectores, además del aeronáutico, con procesos de tratamiento de superficies similares.
Con la tecnología sol-gel, a partir de moléculas compuestas de oxígeno, silicio, hidrógeno y carbono se producen determinadas reacciones químicas que llevan a la formación de una red polimérica capaz de albergar inhibidores de la corrosión ecológicamente aceptables. “Con una aplicación adecuada, forman recubrimientos homogéneos y continuos que constituyen barreras satisfactorias frente a la corrosión en condiciones extremas”, señalan. Esta tecnología, además, conlleva otras ventajas, como la utilización de disolventes no tóxicos y la oportunidad de trabajar a temperatura ambiente.